CONSEJOS
7 consejos básicos para combatir la halitosis
La halitosis o mal aliento es la producción excesiva de gases mal olorosos que emanan de la cavidad bucal. En la mayoría de los casos (hasta el 90% de los casos, según los estudios científicos), esos gases también se producen en la boca. Te damos 7 consejos básicos para combatir este problema:
21 Nov 2024
Archivo Cuida tus encías.
1. Cepillo dental y periodontal
Los implantes dentales son una buena solución para cubrir la ausencia de dientes, pero ni son para toda la vida ni están exentos de cuidados. Alargar su supervivencia depende de ti.
Es fundamental el cepillado de los dientes y de las encías después de cada comida. Ayuda a reducir la cantidad de bacterias y de sustratos, además de colaborar en la prevención de las dos enfermedades más importantes de la boca, la caries y las enfermedades periodontales2
2. Seda dental
El empleo de este recurso es básico para reducir tanto las bacterias como los sustratos, dado que la zona interdental es muy favorable para la acumulación de ambos, además de estar muy protegido. Usar la seda es sencillo, con un poco de instrucción por parte del dentista o higienista dental, y algo de práctica. Es recomendable usarla al menos una vez al día, normalmente antes de acostarse. También se pueden usar cepillitos interdentales, siempre que los espacios interdentales estén abiertos.
3. Limpiador o raspador lingual
También se aconseja limpiar la lengua, dado que es el lugar más importante en la producción de gases, especialmente en personas con la boca completamente sana. Los limpiadores linguales se deben usar con suavidad, con 2-3 pasadas cada vez que se usan, normalmente dos veces al día. Su efecto de limpieza es limitado, dada la irregularidad de la superficie lingual, pero ayuda a disgregar los sustratos y, si se usa un colutorio a continuación, potencia el efecto del mismo.
4. Colutorios
Además de reducir las bacterias, si tienen compuestos antisépticos, es el único enfoque para reducir la volatilización de los gases, mediante la inclusión en la formulación de sales de zinc. Normalmente se usan dos veces al día, después de los cepillados del desayuno y de la cena.
4. Evitar que la boca esté seca
Es importante mantener “hidratada” la boca, bebiendo algo de líquido con frecuencia (aunque sea en cantidades pequeñas), o usando chicles o caramelos sin azúcar
5. Reducir el exceso de proteínas en la dieta
Una dieta con exceso de proteínas puede favorecer la halitosis. Las proteínas aportan los aminoácidos que las bacterias usan en su metabolismo y convierten en compuestos sulfurados volátiles, que producen el mal olor.
6. Encías sanas
Gingivitis y periodontitis son frecuentemente causas habituales de halitosis. Por tanto, es fundamental mantener las encías sanas o tratarlas adecuadamente si ya se sufre gingivitis o periodontitis. También se deben de controlar otras patologías como las caries abiertas, o factores de retención de bacterias como los «puentes» o “empastes” sobrecontorneadas,….
En cualquier caso, ante la sospecha de sufrir halitosis, lo más recomendable es acudir al dentista o periodoncista, para evaluar la situación y posibles causas.