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¡Cuidado con las gingivitis agudas!
La gingivitis se caracteriza por la inflamación de la encía, con hinchazón, sangrado (bien al cepillado o espontáneo) y cambio de color (de rosa a rojizo, como consecuencia del aumento de vascularización en la zona). No suele asociarse con dolor y normalmente se vincula con el acúmulo del biofilm bacteriano.
02 Mar 2023
Existe, sin embargo, otro tipo de gingivitis que se produce de manera más aguda, normalmente en adultos jóvenes sometidos a estrés (exámenes, trabajo…) y sobre todo en fumadores, ( que se llama gingivitis necrotizante (GN). Las características clínicas que presenta la encía son un poco diferentes a la gingivitis convencional: la encía duele mucho al cepillar los dientes y al comer; y hay una ulceración y necrosis de las papilas gingivales, que es evidenciada por el paciente como una “decapitación” de las mismas, con espacios interdentarios que no existían días antes, y con restos de tejido blanco, consecuencia de dicha necrosis. Es también característico el mal aliento, asociado a la necrosis de los tejidos. En algunos casos puede haber incluso fiebre y adenopatías, como consecuencia del paso de bacterias a la sangre.
Como decíamos, este tipo de gingivitis se vincula con épocas agudas de estrés, falta de sueño, mala alimentación, tabaco, consumo de drogas y mala higiene oral. Con un tratamiento adecuado, mediante la realización de dos o tres sesiones de limpieza en el dentista (con anestesia en muchos casos) junto con la administración de colutorios, las ulceraciones pueden curarse en pocos días. Sin embargo, la falta de tratamiento puede evolucionar a que se produzca una pérdida ósea irreversible. Por tanto, se recomienda acudir lo más pronto posible al dentista o al periodoncista para resolver cuanto antes este trastorno.