NOTICIAS

¿Conoces el riesgo de adquirir productos de ortodoncia en internet sin supervisión médica?

En los últimos tiempos se ha extendido la práctica de comercializar alineadores invisibles en las redes. Una práctica que según los profesionales no está exenta de riesgos para las personas que deciden adquirir una alineador sin la supervisión de un dentista.

30 Sep 2021

En los últimos tiempos se ha extendido la práctica de comercializar dispositivos transparentes para alinear los dientes en las redes. Una práctica que, según los profesionales, entraña muchos riesgos para las personas que deciden adquirirlos a través de internet sin la supervisión de un dentista.

Su uso indiscriminado, sin un diagnóstico preciso de la maloclusión del paciente y el conocimiento de su historia médica y dental, y sin la realización de un plan de tratamiento individualizado por parte del profesional, puede suponer un gran peligro. La Dra. María Rioboo nos recordó el pasado mes de junio en un especial en directo que “la ortodoncia es una disciplina sanitaria que debe diagnosticarla, planificarla y supervisarla un profesional cualificado”.

Y es que, como subraya la Dra. Rioboo, “un tratamiento de ortodoncia puede influir no solo en la estética y oclusión dental, sino incluso sobre funciones tan importantes como la masticación, el habla, la respiración o la deglución, sin olvidar la estética del rostro del paciente”.

Ante el aumento en nuestro país de empresas que publicitan y comercializan estos alineadores dentales de manera online, utilizando métodos poco ortodoxos y que repercuten en la salud bucodental de los ciudadanos, la Asociación Española de Especialistas de Ortodoncia (AESOR) ha validado, conjuntamente con la Sociedad Española de Ortodoncia (SEDO), un protocolo de actuación para su uso que puedes consultar aquí. https://www.cuidatusencias.es/2021/05/07/protocolo-de-actuacion-para-el-uso-de-los-alineadores-transparentes/

Conviene recordar que estos dispositivos transparentes son productos sanitarios que necesita supervisión médica, y a pesar de lo que muchas personas piensan, el peso del tratamiento no recae en la fabricación de dichos dispositivos, sino en las directrices marcadas por el profesional que lo indica y que responden a un correcto diagnóstico y planificación de los aspectos técnicos. Si estos no son correctos, el tratamiento no solo no resolverá los problemas sino que pueden llegara a agravarlos e incluso generar otros.