Salud bucodental y calvicie: en busca de una posible asociación

Diferentes estudios publicados en los últimos años apuntan a que una deficiente salud bucodental y, en concreto, la presencia de ciertas infecciones dentales y periodontales, podrían favorecer la caída del cabello.

A día de hoy, aún no se dispone de estudios concluyentes al respecto, pero se va acumulando cierta base científica que tiende a apuntar como determinadas infecciones dentales, como las caries, o periodontales, como la periodontitis, pueden desencadenar alopecia areata, un tipo de calvicie de origen autoinmune en la que influyen factores como la genética, el estrés, trastornos psicológicos, cambios hormonales, infecciones virales o una alimentación deficiente. Y es que, este tipo de alopecia, se asocia a procesos autoinmunes o infecciosos localizados, de forma que incluso una infección dental podría originar esta calvicie tan común.

Una posible explicación de este fenómeno sería porque, cuando se infecta un diente, el sistema inmune genera más glóbulos blancos como mecanismo de defensa y éstos se transportan a otros tejidos del cuerpo, atacando a los folículos pilosos y deteniendo su crecimiento.

Aunque esta patología puede darse a cualquier edad, tiene una mayor incidencia en los jóvenes, con un 60% de los casos que se presentan antes de los 20 años, siendo la forma más común de pérdida de cabello en los niños.

Esta pérdida de pelo, además, aparece de forma repentina en forma de parches redondeados u ovalados en el cuero cabelludo, aunque pueden verse afectadas otras zonas como la barba, las cejas o las pestañas. En el caso de los pacientes con infecciones dentales, estudios recientes han comprobado que muchas de las zonas en las que éstos comenzaban a perder el cabello se encontraban en el mismo lado que la caries, presentándose particularmente en los dientes maxilares, justo por encima de la comisura de los labios, trazando una línea a lo largo del cuero cabelludo, la barba o las cejas.

Por eso, se recomienda que, ante los primeros signos de alerta, se acuda a un médico experto que realice una correcta y exhaustiva historia clínica del paciente, sumado a determinadas pruebas complementarias como analíticas sanguíneas, radiografías bucodentales y una tricoscopia. Además, es de vital importancia un tratamiento odontológico preventivo que actúe en los estados iniciales de las infecciones dentales y periodontales.

Investigadores del Departamento de Estomatología de la Universidad de Granada (UGR) han profundizado en este ámbito, llegando a sugerir que se podría detener la caída del cabello con una buena salud bucal. Por eso, José Antonio Gil Montoya y Antonio Cutando Soriano aconsejan acudir al dentista cuando los pacientes noten la presencia de alopecia areata o alopecia localizada, con el objetivo de someterse a un examen cuidadoso de su salud bucal.